Como madre/padre, siempre he creído que la elección de la escuela adecuada es una de las decisiones más importantes que podemos tomar para el futuro de nuestros hijos. Recientemente, tuve la oportunidad de visitar la Escuela Juan de Margarit, ubicada en la hermosa localidad de Bisbal D’Empordá, y debo decir que mi experiencia ha superado mis expectativas.
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Desde el momento en que llegué a la escuela, pude notar un ambiente acogedor y amigable. La dirección del centro, situada en Carrer del Morró, 37, es fácil de encontrar, y el acceso es bastante cómodo, incluso para aquellos que necesiten asistencia especial, ya que cuenta con acceso para sillas de ruedas y aparcamiento adaptado. Este detalle realmente me pareció fundamental, ya que demuestra el compromiso de la escuela con la inclusión y la accesibilidad.
Al entrar, me recibió un personal amable y profesional. La calificación de 4.4 que tiene la escuela en línea se siente bien merecida. Durante mi visita, observé cómo los docentes interactuaban con los estudiantes: había un ambiente de respeto y atención. Los niños parecían felices y motivados, lo que es un buen indicador de la calidad de la educación que se imparte.
Lo que me gustó de la Escuela Juan de Margarit
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Enfoque educativo integral: La escuela no solo se centra en la enseñanza académica, sino que también promueve el desarrollo emocional y social de los niños. Esto es algo que considero esencial en la educación moderna.
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Actividades extracurriculares: Durante mi visita, me informaron sobre las diversas actividades que ofrecen fuera del horario escolar. Desde deportes hasta arte y música, hay opciones para todos los intereses, lo que permite a los estudiantes explorar y descubrir sus pasiones.
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Comunidad activa: Es evidente que la escuela fomenta un sentido de comunidad. Hay reuniones regulares para padres y eventos donde se involucra a las familias, lo que crea un ambiente de colaboración entre docentes y padres.
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Instalaciones adecuadas: Las instalaciones están bien cuidadas y son adecuadas para el desarrollo de los niños. Desde aulas luminosas hasta espacios recreativos, todo está pensado para crear un entorno de aprendizaje positivo.
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Atención personalizada: Uno de los aspectos que más me impresionó fue la atención que se brinda a cada estudiante. Los docentes parecen estar bien capacitados para identificar las necesidades individuales y adaptar sus métodos de enseñanza en consecuencia.
Un par de áreas de mejora
Aunque mi experiencia fue muy positiva, siempre hay espacio para mejoras. Me gustaría que la escuela pudiera contar con más recursos tecnológicos, ya que el acceso a la tecnología es crucial en la educación actual. Además, sería beneficioso aumentar la comunicación digital, como tener un correo electrónico para padres y un sistema de mensajería para estar al tanto de las actividades y novedades.
La Escuela Juan de Margarit en Bisbal D’Empordá es una excelente opción para aquellos que buscan una educación pública de calidad para sus hijos. Estoy convencido de que aquí, los niños no solo aprenderán materias académicas, sino que también se desarrollarán como personas integrales. Si estás considerando inscribir a tu hijo en este colegio, definitivamente te animo a que lo hagas. ¡Es un lugar donde los sueños educativos pueden florecer!