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Recientemente tuve la oportunidad de visitar CPI Tomás de Lemos, una escuela ubicada en la encantadora localidad de Ribadavia, Ourense. Desde el momento en que llegué, me sentí intrigado por el ambiente acogedor y la atmósfera de aprendizaje que se respiraba en el lugar. A pesar de que tiene una calificación de 3.7, mi experiencia personal fue bastante positiva, lo que me llevó a querer compartir mis impresiones sobre esta institución educativa.
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Instalaciones y Accesibilidad
Uno de los aspectos que más me impresionó fue la accesibilidad de la escuela. El centro está diseñado para ser inclusivo, lo que significa que el acceso para sillas de ruedas está garantizado. Esto es un punto a favor, ya que asegura que todos los estudiantes, independientemente de sus necesidades, puedan disfrutar de un entorno educativo adecuado. Las instalaciones son amplias y limpias, con aulas bien iluminadas que fomentan un ambiente propicio para el aprendizaje.
Personal Educativo
El personal de CPI Tomás de Lemos es otro de sus puntos fuertes. Desde el momento en que entré, fui recibido por un grupo de docentes amables y profesionales que se notaba que estaban comprometidos con la educación de sus alumnos. Durante mi visita, tuve la oportunidad de observar un par de clases y me impresionó la metodología activa que utilizan. Los profesores fomentan la participación de los estudiantes, lo que hace que el aprendizaje sea más dinámico y efectivo.
Actividades y Enfoque Educativo
La escuela se esfuerza por ofrecer una educación integral que no solo se centra en lo académico, sino también en el desarrollo personal y social de los estudiantes. Entre las actividades extracurriculares que ofrecen, se destacan:
- Talleres de arte: Fomentan la creatividad y la autoexpresión.
- Actividades deportivas: Promueven la salud y el trabajo en equipo.
- Salidas educativas: Ofrecen experiencias prácticas que refuerzan lo aprendido en clase.
Este enfoque integral me parece crucial para formar no solo buenos estudiantes, sino también ciudadanos responsables y comprometidos.
Comunidad y Ambiente
Una de las cosas que más me gustó de CPI Tomás de Lemos es el sentido de comunidad que se respira. Los padres y la dirección están en constante comunicación, lo que crea un ambiente de confianza y colaboración. Además, la escuela se involucra en iniciativas locales, lo que refuerza su conexión con la comunidad de Ribadavia. Esta interacción no solo beneficia a los estudiantes, sino que también enriquece el entorno educativo.
Aunque la escuela cuenta con una calificación de 3.7, mi experiencia fue bastante positiva. CPI Tomás de Lemos ofrece un entorno accesible, un equipo educativo comprometido y una variedad de actividades que enriquecen el aprendizaje. Creo que es un lugar donde los estudiantes pueden crecer tanto académica como personalmente. Si estás buscando una escuela en Ribadavia, definitivamente recomiendo que consideres CPI Tomás de Lemos. Sin duda, es un lugar donde se valora la educación y se fomenta el desarrollo integral de los jóvenes.